Lía Salvo es la mayor referente del polo femenino en Argentina. Recientemente nombrada Personalidad Destacada del Deporte por la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires, la jugadora oriunda de América, de 9 goles de hándicap, sigue ganando y avanzando a pasos agigantados en una carrera brillante.
Hoy se encuentra jugando nuevamente el Abierto Argentino de Polo Femenino junto a El Overo Z7 UAE, el equipo de mayor valorización del certamen (30 goles), y que buscará la revancha de la final de 2018, en la que cayeron ante La Dolfina Brava. Mientras tanto, Lía estuvo conversando con PoloLine acerca del aspecto principal del polo: los caballos.
¿Cómo es el caballo de polo perfecto para vos?
Es un caballo con una acción baja, peinando el piso, con gran sensibilidad, muy buena boca y buenos lados.
En tu opinion, ¿cuál es la característica más importante que debe tener todo buen caballo de polo?
En lo personal, y por mi estilo de juego, por el tipo de jugadora que soy, valoro mucho la boca. Para mí es fundamental que los caballos que juego tengan muy buena boca, y de ahí partimos con otros detalles.
¿Cuál sería para vos el número ideal en un lote de caballos?
En la actualidad, con las nuevas reglas, jugando más chukkers y menos tiempo, un número ideal para mí es de entre seis y ocho caballos.
En promedio, ¿cuántos caballos nuevos deben entrar a un lote cada temporada?
Aún no tengo caballos afuera, así que te puedo hablar de mi lote en Argentina. Lo que hago siempre es tratar de ingresar al menos uno o dos por año, y que realmente me mejore el resto de la caballada.
¿Cuál es la parte más importante de la hechura de un caballo de polo?
Creo que es un todo porque no puede fallar ninguna de las etapas; desde la doma, el piloto que la sigue y lo hace de polo, y los jugadores. Te diría que los jugadores estropeamos muchísimos caballos, creo que son muy pocos los jugadores que no estropean un caballo cuando lo juegan. Por eso me parece que todo dentro de la hechura de un caballo es muy importante, y el que logra tener esa cadena aceitada, y ese engranaje bien supervisado y organizado, es para sacarse el sombrero. Porque si esas tres etapas no están bien organizadas y coordinadas, el trabajo puede fallar y no llegar a los resultados.
¿Cual es o ha sido tu caballo favorito y por qué?
He tenido varios caballos favoritos en mi carrera, según mi edad y mi nivel de polo. Tuve yeguas muy importantes, que quizás no eran tan buenas en actitudes, pero que me han dado muchísimo, como mi yegua América, una tordilla bastante alta, que repetía siempre; llegué a meterla hasta tres veces. Me dio mucho. Pero, gracias a Dios, cada año me subo a mejores yeguas. En la actualidad, mi mejor caballo es la Malapata Annie, una yegua de la cría de Horacito Heguy. Es espectacular, totalmente sensible, buena boca, cuerpo, suave, con gran explosión. Acelera sin que vos te des cuenta.
¿Cuál es o ha sido el mejor caballo de polo que viste jugar y por qué?
He visto muchos caballos buenos a los que me encantaría subirme. Miles. Los que vi jugar en el Abierto, en la Triple Corona. Creo que no podría nombrar sólo a uno.
De los caballos que viste jugar, ¿hay alguno en particular que te gustaría probar?
Bueno, ya que estamos con un tema actual, con este equipazo que acaba de debutar, La Natividad, hay una yegua que me gusta mucho, y es Federica, de Bartolito Castagnola. Siempre lo cargo, porque esa yegua me parece divina, y además es muy buena. Es una yegua que me encanta, que quisiera probar.