Recientemente bicampeón de la Copa de Plata en Sotogrande, Juan Martín Nero, 37 años y 10 años siendo un indiscutido 10 goles, se encuentra atravesando un gran 2018, que incluyó además final de la Gold Cup inglesa, aunque estuvo marcado también por algunos altibajos, como él mismo cuenta: “Obviamente que reemplazar a la Falta y la Chicha de un año al otro es imposible, pero invierto año a año buscando mejorar”, haciendo referencia a la Falta Nut y a la Oli Chicha, dos de sus mejores caballos, premios en finales del Abierto Argentino, con quienes no contará más en la Triple Corona. Así y todo, su palenque continúa siendo de los más competitivos del mundo.

A un mes de su debut en la temporada argentina, que lo tendrá nuevamente disputando el Abierto del Jockey, repasa lo que fue su año con La Bamba en el alto inglés: “Fue un primer año lindísimo, pasamos una temporada buena. La organización con Jean Francois (Decaux), la gente, todo impecable, muy divertido; te la hacen pasar bien. Lo habían invitado a Pelon, él me propuso a mí y ahí se armó el equipo. Llegamos a las semifinales de la Copa de la Reina, a la final de la Copa de Oro; obviamente queda un gusto amargo por haber perdido la final, sobre todo por cómo entramos al último chukker”.

Y completa: “Una lástima que Pelon tuvo ese problema en el codo, pero tuvimos la suerte de que estaba Polito, que fue impresionante lo que jugó. Sensación amarga por perder la final, pero positivo por cómo se dio la temporada. El año que viene vamos a volver a jugar juntos con Pelon, con La Bamba, así que divertido”.

Pero independientemente de su rico presente, el futuro cercano se le presenta con un desafío nuevo y distinto luego de unos 9 años comenzando cada año calendario junto a Lechuza, la organización de Víctor Vargas, con quien venía inaugurando su temporada, ya sea en Estados Unidos o en República Dominicana, como ocurriera en estas últimas 3 ocasiones. “No sé si va a ser mi último año con ellos porque la idea de Víctor es seguir jugando en Sotogrande. Después de casi 9 años jugando con él, haciendo las dos temporadas, que eran Estados Unidos -los últimos 3 años Dominicana-, y Sotogrande, es un cambio grande. El año que viene voy a jugar con los Ganzi en Estados Unidos y no voy a jugar esa temporada con Víctor después de 9 años. Se va a extrañar porque fueron años espectaculares, una organización buenísima, mucho tiempo jugando ahí, era como mi casa ya”, sostiene el de Trenque Lauquen.

Por segundo año consecutivo, la temporada en Sotogrande no cuenta con Adolfo Cambiaso, lo que no es un tema menor, aunque el 1 de La Dolfina también ha dado la nota hace algunas semanas cuando reconoció públicamente que en 2019 tampoco será parte de la temporada inglesa, algo que será, al menos, extraño. “No tener que jugarle en contra está bueno (risas)! Siempre es lindo que él esté, porque eso hace que que haya un equipo mejor y bien organizado en el torneo, que es, a su vez, lo que todos buscamos. Siempre en las temporadas compartimos muchas cosas juntos, pero él ahora está en otra etapa, va a ir con Bob (Jornayvaz) a Estados Unidos todo el año; se lo va a extrañar y no tanto a la vez”, afirma su compañero en La Dolfina desde 2011.

Si bien falta para que llegue el 25 de septiembre, fecha programada para el debut de La Dolfina en la Triple Corona, en las entrañas del conjunto de Cañuelas saben que la competencia es cada vez más pareja y que es clave la preparación en todos los aspectos para renovar las ilusiones de éxito para este 2018. “Estamos a full, aunque después de tantos años jugando juntos, habiendo tenido la suerte de ganar, hay que juntar ese hambre que es lo que te hace ganar, ese es un poco el trabajo de Milo. Los 4 somos grandes y nos damos cuenta de que hay que buscar ese hambre para poder ganar, porque hay dos equipos muy buenos que son Ellerstina y Monjitas, y hay 5 equipos más que están un escalón por debajo, muy parejos. Ya hay que empezar a cambiar ese chip porque la temporada va a ser durísima”, destaca el back.

La Dolfina irá por una marca que no se consigue desde el año 1979: ser hexacampeón del Abierto Argentino. De todas maneras, Juanma Nero no se pone ansioso: “Ser los pentacampeones no nos cambia nada. Siempre decimos lo mismo: ‘sos campeón hasta que termina el año, y después empieza el año y no hay campeón’. Hay que juntar ese hambre que es la que te hace ganar. Pero cuando empieza la temporada, como pasa siempre, la encontrás fácil. Estamos todo el año nosotros pensando en el Abierto, tenemos la suerte de tener un buen equipo, de haber ganado estos últimos años y vamos a hacer todo lo posible para ganar otra vez”.

-¿Qué te genera que Marcos Heguy vuelva a involucrarse tan activamente con uno de los equipos?

-Me alegra por él porque es un trabajo, y porque realmente le apasiona estar organizando los caballos y aportando todo eso a Monjitas, un equipo nuevo. A mí, por otro lado, un poquito es como que no me conviene tanto porque Marcos siempre me daba las primeras opciones de sus caballos, y todos los años siempre rescataba una o dos yeguas para el Abierto. Así que las voy a extrañar a esas dos porque no sólo no las voy a tener sino que las voy a tener en contra. Pero si a él le va bien, yo voy a estar contento; tenemos una buena amistad y me alegro por él.

La temporada inglesa 2018 tuvo una novedad más que saliente, y es que la HPA decidió implementar una suerte de hándicap paralelo que permitía a los equipos que participaban de los torneos de 22 goles solicitar que determinados jugadores puedan jugar en los mencionados certámenes con un gol menos de valorización. “Nosotros usamos esa regla porque a Byron (Watson) lo habían subido a 4 goles en el mediano, y jugó con 3 con nosotros en el alto y fue impresionante cómo jugó. Y hubo unos casos más. Por ahí, no es tan mala, porque capaz esos jugadores en el mediano ganaron mucho y no tenían la chance de jugar el alto y ahí se les dio la posibilidad. Creo que están intentando emparejar un poco todo, pero por ahí se les pasa la mano; vinieron los hándicaps y la verdad es que no estoy de acuerdo con varios de ellos. En definitiva, a nosotros nos sirvió, pero pienso que lo más fácil es tener un solo hándicap, y con ése jugar. Es un poco raro que para un lado tengas un gol más que para el otro”.

Por último, Juanma Nero concluye con otro de los temas que marcó la agenda de la temporada inglesa. “Pienso que los árbitros tocaron demasiado poco el silbato. Proponen la idea de jugar, de que sea todo más rápido, pero es el tema de siempre: ¿hasta qué punto lo tienen que manejar un poco más porque se ponen peligrosos los partidos? Y me parece que era demasiado ‘siga, siga’. Creo que tienen que ser un poco más rigurosos con las jugadas peligrosas y, por ahí sí, cuando es un foul bravo, que sean un poco más estrictos, que sea una amarilla o que sea un 30. Porque, si no, se pone peligroso para nosotros y ni hablar para los sponsors”.