POR ANDRÉS UGARTE LARRAÍN
¿Qué ocurrirá con la temporada argentina? Ésta es, sin dudas, la pregunta más escuchada y que más ha circulado por el ambiente del polo en cada rincón del planeta de este deporte en estas últimas semanas. Y, lejos de tener certezas, la incertidumbre es cada vez más grande. Y todo potenciado por que cada novedad puede ser modificada de un minuto para el otro. En este sentido, todo pende de una decisión a nivel político.
Es sabido que hace algunas semanas ha sido aprobado por parte del Ministerio de Salud de la Nación el protocolo para que la actividad pueda regresar eventualmente en Pilar. Pero, claro, la actividad en sí aún no ha sido habilitada, por lo que dicho protocolo se mantiene a la expectativa de poder ser aplicado. Lo principal, tal como apunta cada una de las personas con las que tuvo conversaciones este medio -tanto a nivel AAP como así también criadores, jugadores y todo tipo de protagonistas del mundo del polo-, es estar preparado y listo para poder encarar el comienzo de la actividad apenas se reciba la habilitación por parte de los organismos gubernamentales.
Lo cierto es que las prácticas (entrenamientos) están habilitados en las distintas jurisdicciones, pero sólo puertas adentro de los clubes; es decir, no está permitido que circulen caballos por la calle Gonzalo Tanoira, por citar sólo un ejemplo. Ellerstina ya se encuentra atravesando sus primeras prácticas, tal como lo han publicado en sus redes sociales, y es el caso también de todos los que ya están en Argentina. Todos se preparan para cuando reciban la tan esperada orden de que finalmente puede empezar la competencia.
Lo del protocolo es positivo, claro, para que, cuando haya que arrancar, ya esté todo preparado para poder hacerlo “de un día para el otro”. Pero también cabe aclarar que cada jurisdicción puede ajustarlo según su criterio y necesidades. De todas maneras, dentro de la foto completa, esto no sería un problema.
Al momento de escribir estas líneas, podemos afirmar que el principal optimismo en el que se basa el polo para soñar con el comienzo de la actividad pasa por lo que ocurre con otras actividades. Por ejemplo, las carreras en el Hipódromo de Palermo fueron habilitadas a puertas cerradas, aunque sin entrada ni salida de caballos. Algo similar ocurre en San Isidro, aunque allí las carreras comenzarán a partir del 1° de octubre; por el momento, en ese distrito del conurbano bonaerense, sólo entrenamientos. Pero, incluso, un mayor optimismo nace a partir de lo que está ocurriendo con el fútbol.
Y es que a los encuentros internacionales por la Copa Libertadores que comenzaron a disputarse la semana pasada en Argentina -y en otros países de Sudamérica-, se les suma el partido correspondiente a las eliminatorias sudamericanas que enfrentará al seleccionado argentino con su par de Ecuador el próximo 8 de octubre en la cancha de Boca, es decir, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. ¿Esto quiere decir que dicho distrito cuenta con mayores probabilidades que la provincia para el regreso del polo? No necesariamente. Pero, definitivamente, arroja un manto de optimismo.
La actual etapa de cuarentena decidida por el gobierno argentino rige hasta el domingo 11 de octubre. Difícil es imaginar que el polo comience a disputarse antes de la semana del lunes 19 del mismo mes, pero las esperanzas no se pierden. Se ha escuchado y mucho que sólo hay posibilidades de que se dispute la Triple Corona, debido a la categoría y la trascendencia de sus certámenes. Pero ésta es una información que no podemos verificar, y para este cronista se trata simplemente de una opinión sin sustento. Insisto, hay que tener en cuenta que la situación y los planes pueden modificarse drásticamente de un minuto para el otro, y que se mantenga como única opción. Pero no es lo que indica la realidad en este preciso momento.
Es claro que, eventualmente, se tratará de un calendario acotado, pero eso no quiere decir que se piense únicamente en Tortugas, Hurlingham y Palermo. Inglaterra y Francia, por sólo nombrar a algunos, son claros ejemplos de que si bien se comenzó más tarde, no se priorizó sólo un determinado nivel, sino que se jugó todo lo que se pudo dentro del nuevo lapso de tiempo que tuvieron a disposición. Es el caso de lo que ocurrió en estas últimas semanas en Chantilly: 8 equipos en el Open de France (16 goles), 12 en el Trophee Castel (8 goles), 8 en la Nam’s Cup (4 goles) y 4 en el Open de France Feminin. Un total de casi 700 caballos. Un claro ejemplo de que si hay actividad, va a haber movimiento. Y no hay, en este momento, elementos que indiquen que sólo tiene posibilidades la Triple Corona. Es cierto que es la que mayor exposición e interés genera, pero el polo no gira en torno a ella únicamente. El que así lo piensa, claramente se está perdiendo una gran parte de la película.
Hasta hace algunas semanas había mucha preocupación con respecto a aquellos polistas -algunos, incluso, jugadores de la Triple Corona- que no iban a poder ingresar al país por no ser ciudadanos y no contar con la documentación requerida por el gobierno. Afortunadamente, varios de esos casos se han solucionado, muchos de ellos ya se encuentran en Argentina, e incluso hay muchas expectativas con respecto a que en octubre se flexibilice el ingreso de extranjeros al país, lo que haría resurgir la posibilidad de que ingresen varios patrones, que es algo que hoy está lejos de ocurrir.
En definitiva, las certezas hoy son pocas; las esperanzas, muchísimas. La temporada europea va llegando a su fin, la temporada argentina sueña con luz verde para poder comenzar.